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| Rick Day |
Todo tú. Si de lo único que hablas es de ti, llamas la atención de cualquier forma y sobre todo lo haces de forma negativa como que siempre tienes un problema o enfermedad, entonces vas por mal camino. Un hombre que siempre quiere estar en el escenario resulta aburrido y cansón. También se incluye en este renglón a aquellos que se creen influencers e inalcansables. Trata de interesarte en él y busca puntos en común para conversar.
Cosas que no parecen buenas. Esto viene del dicho 'no hagas cosas buenas que parecen malas', está bien tratar a tu éx; no es lo mismo salir al cine con él o hablarle a escondidas. Está bien mostarte en traje de baño en redes sociales, pero parecer necesitado de atención desde la sexualidad.
No respetar su espacio. Todos tenemos vidas antes de las relaciones, e incluso durante. Si al hombre le gusta ir al gym, déjalo en paz. Si disfruta del domingo en cama, no lo presiones para hacer algo. Puedes dedicar ese tiempo para hacer algo que te guste y así cada quien tiene sus momentos sin el otro. Lo que hace grandiosa a la pareja en lo que aporta cada uno.
Señor falsa modestia. Eres feo y lo sabes, está bien; pero si él está contigo es porque le resultas atractivo de alguna forma. Si te dice que tienes lindos ojos sólo ACEPTA EL HALAGO y da las gracias.
El indiscreto. Si hay algo que molesta a los hombres es que todo el mundo sepa todo de su relación, guárdate lo más que puedas; sobre todo si son detalles de la intimidad.
Nunca paga. No importa si él tiene más dinero que tú. Paga por las salidas de vez en cuando, invítalo tú también.
Fashion Police. Hay momentos en los que algo o alguien llama la atención y puedes reírse juntos de eso; pero no te conviertas en el eterno criticón pendiente del mínimo detalle para tratar de ridiculizar a los demás.
